Paulina Reyes | Luis Martínez
En el Digital News Report del Reuters Institute para México, de al menos los últimos 3 años, se ha venido señalando que las constantes descalificaciones del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador desde su rueda de prensa matutina, han impactado en los niveles de confianza en las noticias que año con año disminuye.
Previo:
La propaganda encubierta como noticia
En un estudio realizado por el ObservaMxMedia, buscamos profundizar sobre este factor, para ello realizamos un sondeo con una serie de preguntas sobre las conferencias matutinas del Presidente López Obrador. En primera instancia, dentro del universo estudiado, 42% aseguró no observar las conferencias del Presidente, 41% las observa ocasionalmente y 17% las observa con mucha frecuencia.
Preguntamos si las afirmaciones del presidente en donde asegura que los medios críticos a su gobierno son mentirosos y obedecen a intereses económicos son justificadas. El 26% de las personas que ven la mañanera consideran que si son justificadas, pero apenas el 8% de las personas que declararon no ver la mañanera consideran lo mismo.
En contraste, el 54% de las personas que no ven la conferencia matutina, aseguran que no son justificadas las declaraciones del presidente, mientras, el 28% de quienes si la ven también consideran que no son justificadas
También preguntamos si creen que las conferencias mañaneras del presidente influyen en la percepción sobre la confiabilidad de los medios de comunicación. Quienes ven y quienes no ven las mañaneras, coinciden en que influyen mucho (57% y 56% respectivamente) y en que influyen algo (40% y 36% respectivamente)
Según los resultados del sondeo, los individuos que consumen La Mañanera con mayor frecuencia suelen calificar de peor manera el desempeño de los medios de comunicación. En índices como calidad del periodismo (-11%), objetividad (-16%) y confianza (-15%)
Estos factores sugieren un creciente escepticismo hacia los medios entre los seguidores de La Mañanera, alimentado por las declaraciones del presidente. Los expertos coinciden en que estos ataques verbales están erosionando la confianza pública en el periodismo, donde debemos recordar el papel de los medios de comunicación en la democracia.
Daniela Mendoza, directora de VerificadoMX, considera que en la conferencia matutina del presidente se ha dado una confrontación pública a la prensa que no le es fiel y le cuestiona los resultados del gobierno. Para Mendoza, el mandatario López Obrador “Expropió la causa de la verdad” y profundiza que “Todo aquel que le contrarie o cuando los números lo contrarían asume que está mal”. También apuntó que su medio verificó durante los primeros 4 años las declaraciones de AMLO en la llamada mañanera, pero dejaron de hacerlo porque se convirtió en un ciclo “donde el presidente repite una y otra vez las mismas falsedades que ellos verificaban, además aseguró que han recibido muchísimas críticas en redes sociales, por parte de personas, grupos o bots qué se dedican a amplificar el discurso presidencial.
“Somos cada vez más precisas para mostrar a la gente cómo hacemos lo que hacemos, no por darle gusto a esas voces críticas, sino por hacer las cosas más a prueba de cuestionamientos, tenemos que explicarle mejor a la gente”
Sin embargo la periodista, también sostiene que esa actitud del presidente Andrés Manuel López Obrador es sólo una parte de lo que ha derivado en la pérdida de confianza en los medios, pero no es la principal.
Cuauhtémoc Cruz Isidoro, es académico y especialista en derecho a la información y libertad de expresión. Sostiene que las declaraciones del presidente no han contribuido a construir una confianza del público hacia los medios. «Se desacredita sin la interpretación de datos, sino mediante señalamientos. Se ha perdido el derecho a la réplica y se cae en descalificación«.
Cruz Isidoro apuntó hacia la sección “Quién es Quién en las Mentiras” – un espacio semanal, dentro de las conferencias matutinas de López Obrador- el cual, según el especialista, no transparenta la metodología para realizar el ejercicio de fact checking gubernamental, lo que ocasiona una deslegitimación y desconfianza hacia los medios expuestos en dicho espacio.
El académico también, reafirma que las Mañaneras son un espacio de comunicación potenciado por las redes sociales que permite al titular del ejecutivo fijar una agenda y además convertirse en un espacio para contestar más allá del derecho réplica, cuyo impacto y alcance impactan en la confianza hacia los medios.
Finalmente concluye que los diferentes medios de comunicación no han logrado tener una práctica para dar una respuesta periodística que logre nivelar el alcance del mensaje oficial.
Es importante entender el fenómeno desde la visión y el ejercicio del periodismo regional, por ello, entrevistamos también a Carolina Fernández, directora del periódico El Popular en Puebla, medio que padeció prácticas de violencia y descalificación desde los gobiernos locales. Ella también apunta a la sección “Quién es Quién en las Mentiras” como un espacio donde reiterada e indiscriminadamente se señala a la prensa como corrupta, mentirosa, vendida y “chayotera” lo que merma la confianza en los medios de comunicación. En la entrevista, Fernández repasa el número de personas periodistas asesinadas sexenio a sexenio. “La violencia es una de las mayores problemáticas que estamos sufriendo y todo es azuzado desde el nivel federal y permea a nivel estatal que es prácticamente un reflejo de lo que pasa en todo el país.”
Al respecto de lo que señala Carolina Fernández, en el último Informe Sexenal sobre Libertad de Expresión y Derecho a la Información en México, realizado por Artículo 19, se señaló a la estigmatización como una forma de agresión mediante la comunicación oficial que se ha adoptado como algo común, normalizando la violencia la cual al ocurrir de forma constante y cotidiana desde la tribuna presidencial se repite en los diferentes niveles de gobierno.
“Una forma característica de violencia este sexenio ha sido la estigmatización, que ha terminado por avalar y reproducir la hostilidad contra el gremio periodístico”… “La frecuencia de estas agresiones preocupa, toda vez que se traduce en cómo autoridades gubernamentales de los distintos niveles (municipal, estatal y federal) pusieron en tela de juicio la ética y el prestigio de los medios de comunicación para evitar la crítica y los cuestionamientos a las gestiones del servicio público.”
Si bien, las constantes descalificaciones hacia la prensa emitidas desde la tribuna presidencial en México, sin duda, impactan en la confianza y credibilidad de las audiencias mexicanas en los medios de comunicación, este no es el único ni el factor más importante, sin embargo, la reiteración y la generalización, ha desencadenado una estigmatización que resulta preocupante ya que avala su reproducción en toda la esfera política y gubernamental del país.
Continúa:
